Es noticia
Menú
Un club de lectura en 'topless' y otros siete curiosos planes de inspiración literaria
  1. Estilo
  2. Ocio
LA CULTURA ES SEXY

Un club de lectura en 'topless' y otros siete curiosos planes de inspiración literaria

“Pensar es el nuevo sexy”. Mejor aún como lo dice Irene Adler en la serie Sherlock de la BBC: “Brain is the new sexy”. Lo elemental aquí es que la cultura es cool.

Foto: Bolsos literarios de Olympia Le Tan
Bolsos literarios de Olympia Le Tan

“Pensar es el nuevo sexy”. Mejor aún como lo dice Irene Adler en la serie Sherlockde la BBC: “Brain is the new sexy”. Lo elemental aquí, con o sin Watson, es que la cultura es cool. Leer tiene mucho del atractivo de Marilyn Monroe entre sesión y sesión de fotos devorando a Joyce (sus páginas). Chicas desnudas leyendo, un perfume embriagador a libros, bolsos que parecen ediciones antiguas, clubes de alterne bendecidos por escritores y sudaderas con Baudelaire a la altura del corazón. No tiene desperdicio.

De estas propuestas con nombre propio, como la cocina de autor, conocemos el principio pero ignoramos el final. Es cuestión de ponerse a leer. Y disfrutar.

1. UN CLUB PARA LEER EN TOPLESS

Las chicas del club Topless Pulp Fiction (www.coedtoplesspulpfiction.wordpress.com) quedan para leer desnudas. Bueno, de cintura para arriba, al grito de “quema el sujetador, no los libros”. Aman, dicen, “los buenos libros y los días de sol”. “Y disfrutamos de ambos a la vez”, añaden. ¿Dónde? En Nueva York. Bajo los rascacielos, el topless es legal. ¿Sus gustos literarios? Los de Quentin Tarantino. Violencia y humor.

No te pierdas. Su visita a la librería y galería de arte Fulton Ryder de NY (www.fultonryder.com) en topless. Por invitación de su propietario, el artista Richard Prince. Y claro, su nutrida galería de fotos.

placeholder

2. UN STRIPTEASE LITERARIO EN TODA REGLA

Shakespeare, Kurt Vonnegut o Edgar Allan Poe, en otro escenario. Envueltos de repente en un show de striptease, a cargo de las Naked Girls Reading, y cierto aire pin-up. Un club nacido en Chicago en 2009, que hoy está extendido en doce ciudades (Austin, Dallas, Londres, Melbourne o Vancouver). Leen sin nada, hasta sin tapujos, y con libros. Ellas están desnudas pero tú puedes vestirte con una de sus camisetas, disponibles en www.nakedgirlsreading.com.

No te pierdas. El concurso literario Annual Naked Girls Reading, para escritores de todo el mundo. Piden relatos “viscerales” de tema libre y diez páginas. El plazo se termina en septiembre. ¿El premio? La entrega de 500 euros por parte de algunas de las integrantes del club.

placeholder

3. UN TALLER DE RELATO, COMEDIA O GUIÓN DE TV EN EL HOTEL KAFKA

Este es el refugio de los amantes de las letras y aspirantes a novelistas, guionistas o reyes de la comedia. Sin estrecheces ni academicismos. Pensado para que te sientas como en casa (o en un hotel con tendencia a la extravagancia y muy kafkiano). Hablando, eso sí, de personajes, estructuras narrativas y palabras.

Ofrece cursos de microrrelatos, monólogos, guión de televisión o producción musical. Con profesores como Eloy Tizón, Almudena Grandes o Nacho Mastretta. Ah, también hay hora del recreo y “zona verde” para explayarse. En Madrid (c/Hileras, 16). www.hotelkafka.com.

No te pierdas. Eso que se llama “networking” (red de contactos profesionales), que aquí lo tienen por bandera. La conspiración de los artistas. Pongo música a tus poemas o por qué no rodamos tu guión.

placeholder

4. LE BUKOWSKI, EL CLUB DE LOS POETAS MUERTOS Y VIVOS. Este club musical, donde se tocan todos los palos, es un viejo conocido de la escena alternativa de San Sebastián (c/de Egia, 18) y uno entre los cafés más bohemios y literarios. Por algo lleva el nombre del poeta maldito y autor de “Erecciones, eyaculaciones, exhibiciones” o “Escritos de un viejo indecente”.

No te pierdas. Su nutrida agenda de conciertos semanal. Para este fin de semana, los belgas Driving Dead Girl (rock and roll y blues), Sumision City Blues + Fiachras (punk-rock) y Urko Menaia & The Basques (folk).

placeholder

5. UNA LIBRERÍA AMBULANTE INSPIRADA EN VIRGINIA WOLF

Se llama Un Cuarto Propio. Justo lo que no le puede faltar a ninguna mujer que quiera escribir novelas, según la escritora Virginia Woolf. Ni eso, ni dinero. A esta librería nacida en Ciudad Real se le olvidó echar raíces. Es un espacio creativo ambulante que te puedes encontrar en cualquier lugar de nuestra geografía, con largas paradas en la capital.

Sí, “un pop up” librero y cultural con ofertas como un taller de literatura erótica o encuadernación japonesa, o una sesión de “tupperbooks”. Las ventas privadas de “tupperwares” de toda la vida pero con libros. Las hay temáticas (literatura fantástica, infantil, noir o relato), y a domicilio o en lugares neutrales, como asociaciones culturales, cafés o una idílica casa rural.

No te pierdas. Su selección bibliográfica. Una criba gourmet de las novedades literarias. Para que vayas al grano.

placeholder

6. UN LIBRO-BOLSO (NO EL LIBRO EN EL BOLSO)

Los han lucido Nathalie Portman o Tilda Swinton. Parecen libros pero son diminutos bolsos-joya. Libros para tener a mano, obra de la diseñadora parisina Olympia Le-Tan, que trabajó para Chanel y Balmain. Busca, porque su colección es toda una biblioteca.

No te pierdas. El libro-bolso favorito de su autora, “Mi tío Oswald”, de Roald Dahl. Lo encontrarás en www.olympialetan.com. Eso sí, tendrás que desembolsar 1.200 euros. Por supuesto, en edición limitada.

7. UN POETA EN TU SUDADERA. Baudelaire o Rimbaud irán siempre contigo. Y ojo, porque estarán a la altura de tu corazón. Gracias a las sudaderas de la firma Ostwald Helgason, la suma de la alemana Susanne Ostwald y el islandés Ingvar Helgason.

No te pierdas. El precio. Ahora las puedes conseguir por 77 euros en rebajas. Antes, 153 euros.

placeholder

8.YUN PERFUME A MODO DE EPÍLOGO

Si te gusta a qué huelen los libros, te gustará este perfume. Lo identificaron el editor Gerhard Steidl, el perfumista Geza Schoen y el diseñador Karl Lagerfeld, y lo llamaron Paper Passion”. Hecho ex profeso “para amantes de los libros” y unisex. Los tres se llenaron de argumentos.

placeholder

“Pensar es el nuevo sexy”. Mejor aún como lo dice Irene Adler en la serie Sherlockde la BBC: “Brain is the new sexy”. Lo elemental aquí, con o sin Watson, es que la cultura es cool. Leer tiene mucho del atractivo de Marilyn Monroe entre sesión y sesión de fotos devorando a Joyce (sus páginas). Chicas desnudas leyendo, un perfume embriagador a libros, bolsos que parecen ediciones antiguas, clubes de alterne bendecidos por escritores y sudaderas con Baudelaire a la altura del corazón. No tiene desperdicio.

Libros Madrid Nueva York Londres Comedia Literatura Humor Rock
El redactor recomienda